miércoles, 12 de agosto de 2009

Historia del cantero

Había un hombre que llevaba piedras de una cantera a una construcción en los tiempos que el único medio de transporte era un carro.

Un día de trabajo llovía a cántaros y, como no había carreteras, el suelo estaba completamente embarrado y el peso era tal que el animal, extenuado, murió de agotamiento. El carreteró se echó toda la culpa a sí mismo por haber dejado que muriese el animal, así que bajó del carro y se puso en su lugar: tomó los extremos y empezó a tirar con todas sus fuerzas.

Por el camino se encontró con más carreteros que le ofrecieron una porción de su carro para cargar la piedra o incluso dejarle un animal para que tirase, pero él sentía que, ya que había sido culpa suya, tenía que acabarlo él solo y no hizo caso a los pocos compañeros que le quisieron ayudar.

El hombre sufrió el mismo destino que el animal: cayó extenuado en medio del camino por querer cargar sobre sus hombros un enorme peso que no tendría por qué haber cargado y no querer aceptar ninguna ayuda.

1 comentario:

  1. Cuanta razón, yo misma he cargado con mas peso del que puedo soportar y estoy pagando las consecuencias, pero doy gracias que tengo a gente a mi alrededor que me esta ayudando, y sí la acepté, con el tiempo sabré como devolverles el favor.

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